Variantes en Masculino de érica Organizadas por Lengua

El érica ha tenido, a lo largo de la historia, una conexión profunda con su forma femenina en diversas tradiciones, pero, al igual que otros nombres, ha dado vida a formas masculinas que mantienen su esencia primordial y, a su vez, se transforman para encajar en distintos contextos culturales y lingüísticos. Estas variantes masculinas, aunque a menudo pasan desapercibidas, presentan una opción robusta y singular que refleja tanto la musicalidad como el significado intrínseco del nombre original.

En múltiples regiones del planeta, resulta habitual que los nombres de mujeres se conviertan en sus contrapartes masculinas mediante sutiles ajustes en su composición, ya sea incorporando o alterando ciertas terminaciones, o a través de modificaciones fonéticas que les permiten alinearse con las convenciones lingüísticas de un idioma en particular. Este proceso de transformación da lugar a nombres masculinos que, en numerosas ocasiones, adquieren una personalidad única, utilizándose en variados entornos formales y cotidianos. Así, el nombre érica se vuelve una manifestación de identidad en diferentes contextos culturales.

Gótico:

AiwareiksEuric

Inglés:

AricEricErickErik

Francés:

éric

Portugués:

érico

Catalán:

èric

Letón:

ēriks

Estonio:

EerikEeroErikErkki

Finlandés:

EerikEerikkiEeroErikErkki

Nórdico antiguo:

Eiríkr

Islandés:

Eiríkur

Noruego:

EirikErik

Alemán:

EricErichErik

Español:

EricErik

Sueco:

EricErikJerkJerker

Croata:

Erik

Checo:

Erik

Danés:

ErikJerrik

Holandés:

Erik

Húngaro:

Erik

Escandinavo medieval:

Erik

Eslovaco:

Erik

Esloveno:

Erik

Lituano:

Erikas

Polaco:

Eryk

Te invitamos a explorar un compendio de formas masculinas del nombre érica, agrupadas por idioma. Esta categorización te proporcionará una perspectiva única sobre cómo cada cultura transforma este nombre, revelando la diversidad en la evolución de un mismo vocablo en distintos contextos lingüísticos.

Las interpretaciones masculinas de érica revelan la capacidad de los nombres para transformarse y variar en función del tiempo y las distintas tradiciones culturales. Cada lengua presenta su forma única de modificar el nombre érica para que se ajuste al género masculino, generando así una gama de alternativas que mantienen la esencia del nombre original, pero que se alinean a las convenciones lingüísticas y culturales características de cada área geográfica.